El Concello de A Guarda, como parte del Fondo Gallego de Cooperación y Solidaridad, cofinancia, junto con todos los miembros del Fondo, 25.000 euros un proyecto en Mozambique para que las mujeres embarazadas empleen los servicios de salud, antes, durante y después del parto, superando las barreras socioculturales.
La actuación se ejecuta de la mano de la Fundaçao Encontro en cuyo equipo de coordinación se encuentra la enfermera coruñesa María José Castro. Visitas a 240 domicilios y un ciento de charlas y obras teatral sobre cuidados básicos de salud y prevención de dolencias son algunas de las actividades que un grupo de activistas está llevando a cabo para concienciar a mujeres y familias sobre la importancia de acudir a las consultas pre y post parto, así como de dar la luz en la maternidad. También se crearán grupos de “madre para madre”, donde se intercambian experiencias a fin de multiplicar la sensibilización.
Según las creencias locales, el embarazo debe ocultarse hasta que la barriga sea grande, ya que hablar sobre el tema atraería la mala suerte. Esto lleva al sufrimiento y muerte de muchas mujeres durante la gestación y en partos no seguros. Las niñas y niños tampoco suelen seguir los pertinentes controles y hay un elevado riesgo de desnutrición, por lo que la intervención incide al mismo tiempo en identificar a la población infantil que precisa una atención especial en este sentido.
El proyecto comenzó en agosto de 2015 y se prolongará hasta julio de 2016 en los distritos de Boane y Namaacha, en la provincia de Maputo. En este tiempo se espera que aumenten en un 25% las embarazadas que acuden a la consulta y que 1.290 niños y niñas lleven control pediátrico, así como mejorar la formación en salud general.
Mozambique se halla entre los países con un Índice de Desarrollo Humano más bajo del mundo, ya que es el noveno por la cola. Además de la pobreza, el contexto de la intervención viene marcado por la desigualdad de género, la prevalencia de enfermedades como el sida o las dificultades de acceso al agua. La desnutrición crónica afecta a un 44% de la población infantil.