Escolares de Camos y Chandebrito comenzaron en la mañana de ayer los trabajos para crear una gran área de cortafuegos natural en el futuro parque forestal ‘Os Matos-Río Táboas’ del Concello de Nigrán.
Así, el alumnado de 5 y 6 de Primaria del CEIP A Cruz y de 5 del Colegio Estudio plantó en 2 hectáreas ubicadas en un mirador en la intersección de las dos parroquias 150 árboles autóctonos (nogales, alcornoques, cerezos, robles, abeleiras y bidueiras) bajo la dirección de la brigada mediombiental municipal y de agentes medioambientales de la Xunta.
El Concello ha previsto completar la reforestación de esta zona con 650 árboles más el sábado 17 de febrero empleando la ayuda del vecindario. En total, se invirtieron 8.000 € en la compra de estos 800 árboles de cerca de 2 metros de altura y que se diseminarán por estas 2 hectáreas llenas antes de especies invasoras, fundamentalmente eucalipto y acacia.
“Trátase de vincular afectivamente á rapazada e aos veciños co futuro parque forestal, de que o vexan medrar sentíndose partícipes do mesmo. Eles velarán despois polo seu benestar, o defenderán e o gozarán no seu máximo esplendor”, explica el alcalde, Juan González sobre este tipo de iniciativas educativas, al tiempo que explica que todo el entorno de la zona y la propia margen de la carretera será limpiada de invasoras y maleza para formar un anillo de protección previo a esta área cortafuegos llena de especies autóctonas que frenan la propagación de los incendios, tal y como ya se hizo en las zonas de viviendas de Camos y Chandebrito.
Estos mismos escolares, también a través de la brigada medioambiental del Concello y del programa de huertas escolares municipales, sembraron hace dos semanas bellotas para suministrar al vivero del parque de carballos y, además, aprendieron a inocular shiitakes en eucaliptos.
Parque Forestal
Este espacio natural, vertebrado por el bosque del río Táboas, se ubica en 42 hectáreas (420.000 m²) de terreno totalmente calcinadas en los incendios de 2017, 30 de ellas pertenecen a la Comunidad de Montes de Camos (parcelas de Castelo y As Chans) y 12 a la de Chandebrito (As Rozadas) y fueron cedidas al consistorio con este fin. El objetivo de las tres entidades es crear un espacio de recreo libre y público, con valores naturales, culturales y paisajísticos únicos que serán recuperados, conservados y promocionados, además de servir de barrera protectora frente al fuego. La inversión total del Concello será de 400.000 € y los trabajos los lleva adelante su propia Brigada Medioambiental bajo la dirección técnica de ‘Landra’’.
«Despois dos incendios, tanto dende o Concello como dende as dúas comunidades, quixemos por en valor este espazo e darlle unha función social; ademais, servirá de protección fronte ao lumes para os núcleos de poboación máis próximos«, resume el regidor, Juan González.
El proyecto contempla en una primera fase la erradicación completa de las especies invasoras (fundamentalmente eucaliptos y acacias) y la realización de plantaciones autóctonas y, en una segunda fase, la creación de espacios públicos, restauración de un molino de agua, puesta en valor de los petroglifos…
El grave incendio de 2017 asoló todo este terreno, tanto la masa arbolada de eucaliptos con aprovechamiento maderero como el bosque autóctono de ribera y las plantaciones de coníferas y frondosas. Actualmente el terreno presenta un regenerado natural de pinos, eucaliptos, robles y castaños. El objetivo es que, gracias a la intervención humana, se recupere el bosque autóctono gallego propio de este bosque, con un inmenso atractivo por la gran variedad y biodiversidad de especies vegetales y animales que lo forman. Así, todos los trabajos irían destinados a restaurar la cubierta arbórea a mantener sólo su microclima húmedo.
El parque forestal contempla medidas naturales de prevención y defensa contra los incendios; de puesta en valor de los elementos patrimoniales y culturales (protección de los yacimientos, fundamentalmente petroglifos; o restauración del conocido como ‘Muíño do medio de Táboas); medidas de puesta en valor de los elementos sociales y de uso público contemplando la accesibilidad para todos (creación de un área recreativo en O Serradouro y As Rozadas, la primera de ellas incluye zona de aparcamiento); acondicionamiento del mirador de O Castelo o creación de una ruta de subida al mismo; medidas de señalización, promoción e interpretación de los valores del parque forestal (paneles, pictograma, señalizaciones, códigos QR…)
