No hay nada más prestigioso para un músico que tocar con una gran banda, con una orquesta filarmónica o con un importante grupo musical. Rubén Cerqueira es un joven trompetista de Mougás, Oia, que ha logrado que uno de sus sueños se haga realidad.
Tras colaborar con la Orquesta Clásica de RTVE y tocar el pasado sábado 25 de noviembre en el Gran Teatro Reina Sofía de Benavente con la Banda de Música del Maestro Lupi, donde recibió los aplausos del público por su solo de trompeta al interpretar la banda sonora de la película Apolo 13, ahora se embarca en la gira de Mocedades, junto a Los Panchos, que lo llevará desde este viernes por nueve ciudades españolas, desde Bilbao, hasta Barcelona, pasando por Madrid, Valencia, Zaragoza o A Coruña.
«Es una oportunidad que no me esperaba. Tengo que dar las gracias a uno de mis compañeros que participa por confiar en mí. Me ilusiona mucho y es todo un honor tocar con un referente de la música española como son Mocedades. Lo escuchaban mis padres cuando yo era pequeño, ahora, al oír una de sus canciones me transporta a mi infancia», afirma el trompetista.
A sus 36 años y de profesión militar, Rubén lleva la música en la sangre, ya que parte de su familia, entre ellos su padre Maximino y su tío Joaquín, también son músicos y tocaron igual que él cuando tenía 15 años en la Banda de Música Unión Musical de Mougás.
Se crió en Coruxo (su madre es de Vigo), y a los 18 se fue a vivir a Mougás, de donde es su padre, y donde reside actualmente su familia. Comenzó en la música a los ocho años tocando ya con esa edad en la Banda Unión Musical de Coruxo como trompetista. Más tarde haría colaboraciones en la Banda de Beade, Caldas de Reis o en la Banda de Música Unión Musical de Mougás.
Tras sacarse el grado elemental y profesional en el Conservatorio de Vigo, obtuvo el grado superior en el Real Conservatorio de Música de Madrid. Desde el 2020 forma parte de la Banda de Música del Maestro Lupi, donde también da clases de trompeta.
A los 23 años entró a formar parte del Ejercito de Aire en León. Ahora es Sargento Primero. Su esposa Noemí también es militar y, como él, amante de la música. «Es percusionista y toca igual que yo en la Banda del Ejército del Aire en Cuerpos de Música Militares de León», comenta el trompetista. Tienen una hija de cinco años que aún no saben si va a seguir sus pasos. «Viene a nuestros conciertos, pero de momento lo único que quiere ser es princesa», indica emocionado su padre.

