El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha lanzado este martes un contundente llamamiento a la Xunta de Galicia, instándole a reducir “de forma inmediata” el caudal ecológico que se libera desde la presa de Eiras, en respuesta a la situación de sequía “severa” que atraviesa la región y a la falta de previsión de lluvias en los próximos quince días.
El regidor vigués ha criticado duramente la gestión del gobierno autonómico en esta materia y ha advertido que, en lugar de aplicar soluciones, está agravando el problema. “A Xunta non pode aumentar o caudal ecolóxico como quere facelo. Ao revés, ten que diminuílo con respecto ao actual”, aseguró, subrayando el carácter urgente de esta medida.
Caballero recordó que, incluso en situaciones de prealerta por sequía como la actual, el caudal ecológico puede reducirse sin comprometer la biodiversidad del entorno. “O caudal ecolóxico previsto para situacións como a actual, de prealerta por seca, mantén toda a biodiversidade, polo que non significa un dano”, afirmó.
El alcalde también lamentó la falta de planificación por parte de la Xunta, a la que acusa de actuar de forma irresponsable. “Estamos nunha situación moi complicada e a Xunta empeóraa. Non só non tomou as medidas que tiña que tomar, non só non quere facer unha segunda presa augas arriba que non dana a ninguén, senón que, ademais, aumenta o caudal ecolóxico porque teñen unha programación absolutamente impensable, ridícula, desastrosamente mala e queren que Vigo quede sen auga”, declaró con dureza.
La presa de Eiras es la principal fuente de abastecimiento de agua potable para Vigo y su área metropolitana. En un contexto de escasez hídrica prolongada, el debate sobre la gestión del caudal ecológico —el volumen mínimo de agua que debe liberarse para garantizar el equilibrio de los ecosistemas fluviales— se ha convertido en un punto de fricción entre el gobierno local y la Xunta.
