O Rosal ya comenzó la transformación de la carretera que une Tabagón, As Eiras y Goián. Esta semana se iniciaron los trabajos de ejecución de la primera fase de mejora de la movilidad peatonal en la carretera provincial EP-3303, un proyecto que permitirá conectar los dos núcleos de la ribera de O Rosal con el de Goián, apostando por un modelo en el que se recuperen los espacios para las personas y se fomente una movilidad sostenible.
“Para nós é un orgullo ver como O Rosal vai dando pasos na súa transformación non só en termos de mellora viaria, senón de mobilidade e de comunicación entre os núcleos rurais. Apostamos por un novo concepto no que a posta en valor das persoas e do ámbito rural é fundamental, adaptándonos a unha nova realidade de mobilidade”, destaca la alcaldesa, Ánxela Fernández Callís, que visitó el inicio de los trabajos acompañada del concejal de Vías y Obras, Germán Fernández.
Los trabajos de la primera fase de mejora durarán alrededor de 10 meses, durante los que se remodelará un tramo de 1,7 kilómetros que cuenta con un intenso tráfico rodado y también con una importante movilidad a pie, tanto de vecinos que acuden hasta Tomiño como de personas peregrinas que conectan con el Camino Portugués por la Costa.
“Queremos fomentar a vida rural e mellorar as posibilidades de comunicación dun xeito sostible, potenciando alternativas ao vehículo privado e dándolle prioridade sempre ás persoas”, explica. Por ese motivo, se creará un carril peatonal y ciclista que se completará con una plataforma de circulación de dos carriles con arcén y con reductores de velocidad. El Concello procederá además a la renovación de las redes de abastecimiento de la zona y hará la canalización soterrada de la red de iluminación pública. Para garantizar la seguridad en el entorno, se dispondrá también de una plataforma única con limitación de velocidad a 20 km/ h en la zona del CRA María Zambrano.
El proyecto final se desarrollará en varias etapas para cubrir un tramo total de 4,5 kilómetros. En las obras de esta primera fase se invertirán más de 650.000 euros, de los que el 80% serán aportados por la Diputación de Pontevedra y otro 20% por el Concello de O Rosal.