En estos momentos se están ejecutando los trabajos de demolición de la Grada de Gol con un protocolo “muy definido y delicado” para evitar derrumbamientos. El material resultante será utilizado en la cimentación de la nueva grada.
El alcalde dio cuenta este miércoles de la evolución de la construcción de la nueva Grada de Gol del Estadio Municipal de Balaídos, donde avanza la destrucción de la vieja cubierta con un “protocolo muy definido y delicado” para mantener el equilibrio con respeto a los pilares sin que se produzca ningún derrumbamiento.
Los trabajos de demolición se iniciaron por el lado más próximo a la Grada de Río, desde la parte interior del estadio derribando unos 8 metros, y posteriormente se va destruyendo de forma sucesiva 1 metro por el exterior del estadio y otro metro por la parte interior para que se pueda mantener el equilibrio.
Caballero explicó que todo el material demolido va a ser triturado y se utilizará para el relleno y cimentación sobre lo que se construirá la nueva Grada de Gol, evitando así la generación de residuos. También será preciso derribar los túneles de los antiguos vestuarios y el consecuente relleno de ese espacio. Desde ese momento, apuntó, “estaremos en condiciones de iniciar la construcción de la nueva grada”. El Concello entregará a las personas interesadas un trozo de la Grada de Gol, como ya se hizo con Marcador Centenario.
Asimismo, señaló que en el partido de este miércoles, dado que no interfiere en la obra, el Concello autorizó al Celta a la instalación de una grada supletoria, con 609 asientos adicionales, con la previsión de mantenerla hasta el final de la temporada para los partidos ante el Sevilla y Rayo Vallecano.
El regidor recordó que la obra tiene un presupuesto de 26 millones de euros y la previsión es que esté operativa a principios de 2027. Así, quedarán completadas y preparadas 3 de las 4 gradas para ser usadas en el Mundial 2030, a las que hay que añadir la ampliación de la Grada de Tribuna.