El Mecalia Atlético Guardés dio la cara pero no pudo regresar de Donosti con nada positivo en cuanto a puntos. El Bera Bera superó a las jugadoras de negro y amarillo amparándose en un parcial de 6-0 mediado el primer tiempo que permitió a las locales tomar una cómoda renta en el marcador. Diez minutos exactos sin marcar estuvieron las pupilas de José Ignacio Prades, a las que no les quedó otra que ir a remolque durante toda la segunda mitad.
El caso es que no empezó mal el Guardés. Aguantando el tipo ante el líder en un intercambio de golpes que se tradujo en una sucesión constante de goles hasta el 5-5. Algo poco habitual en dos equipos que basan su fortaleza en la fase defensiva. Corría entonces el minuto 8 y ahí se empezó a desequilibrar el partido.
Porque durante los siguientes diez minutos, el colectivo miñoto no vio portería. Unas veces Alice Fernandes, otras la defensa donostiarra y otras las imprecisiones visitantes dejaron a cero al Guardés durante un lapso en el que el Bera Bera anotó seis goles. Un parcial de 6-0 que marcó la diferencia.
Porque, a partir de ese momento, la igualdad regresó. De nuevo hubo intercambio de golpes con Malena Cavo martillando para el conjunto azul y las de negro y amarillo repartiéndose la responsabilidad goleadora. También con un bonito duelo en los lanzamientos de siete metros entre Laura Hernández y Patrícia Lima.
Pero la renta de media docena de goles se mantenía inalterable. Y así se llegó al descanso (17-11). A la vuelta, el decorado apenas cambió. Sandra Santiago compareció en la pista para intentar comandar la remontada. La lateral internacional portuguesa puso su gran lanzamiento al servicio del equipo y acumuló varios goles consecutivos hasta irse a cinco. El problema es que Bera Bera respondía en la otra portería. La diferencia no menguaba.
Fruto de esa impotencia, el conjunto miñoto bajó un poco el ritmo. De repente, no encontraba vías de agua en el 6:0 azul. Así, la ventaja se fue incrementando poco a poco hasta llegar a ser de diez goles. Un tanto de Ángela Nieto sobre la bocina la dejó finalmente en nueve (33-24) pero certificó igualmente la derrota de la escuadra visitante. El Guardés acaba quinto la jornada, con todas las opciones de meterse en Europa intactas. Ahora toca recuperar las fuerzas durante el parón de selecciones de la semana que viene para regresar a San Sebastián dentro de dos, en esta ocasión, para disputar la Copa de la Reina.