El Ribera logró la victoria en casa, ante un Mos que sumó la primera derrota de la temporada.
Desde el primer minuto, los dos equipos que se enfrentaban en el estadio de A Mata, tanto el U.D.Ribera como el U.D.Mos, salieron a por el partido y a pesar de que el equipo visitante estaba invicto hasta este domingo, los rosaleiros salieron a por todas, plantando cara con buen juego, sobre todo por abajo y con mucho carácter, algo que decidió que el equipo local se llevase los tres puntos.
La primera mitad estuvo marcada por los continuos ataques del Ribera, donde Antón, tanto por un lado como por el otro, abría el campo con balones a los extremos, Migui y Adri, que eran los que causaban el peligro a la zaga visitante.
El conjunto de mosense, trataba de sacar petróleo en acciones a balón parado, así como faltas o saques de esquina, ya que el tallaje de sus jugadores era bastante superior en comparación con los hombres de Yago Cruces. Al contraataque también eran muy peligrosos, llegando a crear alguna de las ocasiones más claras del partido. La primera mitad terminó con un reñido 0-0, que pudo haberse decantado por cualquiera de los dos equipos.
El segundo tiempo no pudo empezar con más ritmo, ya que después de una jugada trenzada en el medio campo de los locales, el balón llega a Migui, quien en banda izquierda retiene y aguanta el balón. Nico Andura se desdobla, pide el balón centra y lo pone en la cabeza de Nico Ortega, que con un gran testarazo no perdona y a bocajarro marca el 1-0.
Los visitantes no bajaron los brazos y abrían el campo intentando entrar por las bandas. La ocasión más clara para el equipo de Mos llegó a la salida de un corner cabeceado a la escuadra del meta Pablo, el cual con una gran estirada logró tocar el balón con la punta de los dedos y hacer que este golpease el travesaño y se despejase el peligro.
Se sucedían los minutos, y el conjunto visitante, con todos los cambios hechos buscaba recursos y velocidad mientras que el conjunto local intentaba poner pausa, tranquilidad y salir con el balón jugado manteniendo la calma.