Este domingo dormiremos una hora menos. La razón no es otra que el cambio de hora que se realiza cada último domingo del mes de marzo y con ello, entraremos en el horario de verano. Así, cuando sean las 2:00 horas de la madrugada, tendremos que adelantar el reloj a las 3:00 horas.
La entrada del horario de verano en España en esta ocasión coincide con el tramo final de la Semana Santa 2024.
De esta manera, el país cumple con la directiva europea del año 2000 que afecta, sin excepción, a todos los Estados miembros de la Unión Europea.
La modificación horaria de primavera se aplica en todos los países de la Unión Europea (UE), con la intención de ajustar la jornada laboral a las horas de luz natural. A partir del domingo amanecerá y anochecerá más tarde.
Normalmente, los cambios de hora afectan directamente en los biorritmos de cada persona. Durante los primeros días, nos solemos sentir cansados, fácilmente irritables e incluso, es posible que suframos falta de concentración o trastornos del hambre. Durante la jornada laboral, estaremos más cansados de lo habitual, más susceptibles y nos costará concentrarnos en nuestras tareas.