ALFREDO

Indignación en Baiona por la muerte de una yegua preñada de un disparo de una bala expansiva, un tipo de proyectil diseñado para expandirse o deformarse al impactar un objetivo, cerca de O Cortelliño, en el monte de la Serra da Groba.

Fue el presidente de la Asociación de Cabalos da Serra da Groba quien halló el animal muerto cuando pasaba por la zona. «El caballo lo vi esta mañana cuando subía por la carretera. Estaba con las patas levantadas, paré y ya le vi el disparo y avisé al dueño y a la Guardia Civil», señala Modesto Domínguez Roda, Tito.

Creen que el disparo se produjo ayer a última hora o esta noche y desde la carretera. «El animal vino sobre unos 20 metros desde la carretera hasta donde falleció, además, allí está el pelo del animal donde fue el impacto, que alcanzó los pulmones y el corazón», afirma el presidente.

Se trata de una yegua preñada de cinco años que pastaba libremente por los montes de A Serra de Groba y que era de un vecino de Baíña. Tito asegura que no hay ningún conflicto entre ganaderos y desconocen el porque de este maltrato animal. La Guardia Civil se llevó un trozo de la bala y ya está investigando los hechos.

Este suceso se viene a sumar al ocurrido en enero de 2019 cuando aparecieron muertos a golpes cuatro caballos, y cinco malheridos, en la zona denominada O Areeiro, en el monte de Viladesuso, Oia.

Los animales estaban todos dentro de la manga, un túnel con barandillas de hierro para desparasitar a las reses. “Las tuvieron que meter intencionadamente en el lugar para después matarlas a golpes. Esto nunca ocurrió aquí”, relataba por entonces un ganadero de Viladesuso a Telemariñas.