Este viernes, A Guarda vivió una fiesta por todo lo alto. La emblemática tapería restaurante La Casa de la Abuela celebró su 30 aniversario con una jornada inolvidable, en la que más de mil personas se congregaron para brindar por tres décadas de buena comida, tradición y hospitalidad.
El artífice de esta historia es Juan Carlos Alonso, natural de Priegue, Nigrán, quien llegó a A Guarda con apenas 17 años “porque me eché novia”, como él mismo cuenta con una sonrisa. Fue precisamente el amor lo que lo llevó a esta villa marinera y lo que lo retuvo para siempre.
Con tan sólo 19 años, el 16 de junio de 1995, decidió abrir La Casa de la Abuela, un pequeño local que inicialmente contaba con un salón interior y barra. El nombre del restaurante no es casual, era la antigua vivienda de la abuela de su novia, y el cariño que inspiraba ese hogar ha marcado el estilo del restaurante desde entonces.
Cinco años más tarde, el espacio creció con una ampliación hacia el jardín, pero el espíritu siguió siendo el mismo: una cocina sencilla, sabrosa y hecha con mimo. “Empezamos con pimientos de Padrón, tortilla, tabla de quesos, jamón, revueltos y chorizo al infierno, y fuimos ampliando poco a poco con jarrete de ternera, rabo de vaca, entrecot, secreto, bacalao, lubina o dorada”, cuenta Juan Carlos.
A lo largo de estos años, La Casa de la Abuela ha sido testigo de incontables anécdotas y visitas ilustres. Una de las más recordadas ocurrió el 22 de agosto de 2005, cuando apareció por sorpresa José Manuel Durão Barroso, entonces presidente de la Comisión Europea. “Dos días antes entraron dos tipos cuadrados vestidos de negro a revisar el local. Después vino él. Cenó tortilla, revueltos, setas… algo muy nuestro”, recuerda.
Otro momento especial fue la visita del chef Sergi Arola, con una estrella Michelin, acompañado de la televisiva Silvia Fominaya. “Le dije en broma que lo mejor sería que pasara él a la cocina. Fue muy amable y cercano”, afirma.
El restaurante también ha recibido a periodistas como Manuel Campo Vidal, Sonsoles Ónega, María Rey, a futbolistas como Mostovoi o Berizzo, actores como Miguel Ángel Silvestre, Tamar Novás, o el cómico Touriñán. Las paredes del local cuentan con más de 100 cuadros y fotografías de clientes y amigos que han querido dejar su huella en este rincón entrañable de A Guarda.
El secreto del éxito, para Juan Carlos, es claro. “Lo que hacemos, lo hacemos con cariño. Nuestra cocina es sencilla y de calidad. El que viene, repite. Ya tenemos clientes que son como de la familia”, comenta emocionado por estos 30 años al frente de La Casa de la Abuela.
La gran fiesta del 30 aniversario fue una muestra de ese vínculo especial con el público. Contó con las actuaciones de los baioneses Los del Barro y el DJ Cristian Pereyra, además de una generosa oferta de pinchos, bebidas y buen ambiente. “Foi unha festa rachada”, resume Juan Carlos. “Muchas gracias a todos. Estoy súper agradecido de que tanta gente viniera a la fiesta, de que compartieran estos 30 años con nosotros. También quiero agradecer al Concello su colaboración en la celebración de la fiesta”.
Ahora, el futuro del restaurante parece asegurado. Su hijo Carlos, de 23 años, lleva ya cuatro trabajando en el negocio familiar y está listo para tomar el relevo. La Casa de la Abuela continuará, como hasta ahora, acogiendo a quien entre por puerta, con una tapa bien servida preparada con cariño.

