El tudense Ramón Rosada, socio de la empresa “Sotecable” con sede en Valladolid, se ha reunido con la alcaldesa de Oia, Cristina Correa, para presentarle un sofisticado sistema antirrobo de cable eléctrico, evitando que los ladrones roben el cableado de las farolas públicas, que cuestan millones de euros al año a las arcas del estado.
Este método evita los robos de cobre de los tendidos eléctricos mediante un sistema de obstrucción del cable eléctrico impidiendo que se deslice e imposibilita a los rateros la sustracción del mismo.
Este sistema, que ha sufrido varias modificaciones con la ayuda de las fuerzas de Seguridad del Estado, Adif, RENFE y Red Eléctrica Española, lo ha diseñado uno de los tres socios de la empresa, Andrés Díaz, un fontanero que, después de ver la cantidad de robos que había y observando el sistema de una farola se puso manos a la obra y terminó ideando el sistema que ahora presentan.
“Estamos trabajando con empresas multinacionales españolas, como Acciona o Sacir que están realizando trabajos en el canal de Panama. Con Fomento, que está trabajando en Arabia Saudí o en el Ave de California,” comenta Ramón, “también exportamos a Chile, Argentina, Mexico, Italia o Francia”.
Aunque depende del diámetro de la farola, el precio del aparato ronda los 100 euros, “es económico porque la reposición del cable en diez farolas ronda los 40.000 euros, mientras que la instalación de las diez farolas estaría entre los 1000 y los 2500 euros, por lo que la inversión está más que amortizada” relata Rosada, “hay casos en los que se ha robado el cable en polígonos industriales y la reposición pasó de los 800.000 euros, mientras que la instalación del sistema antirrobo en dicho polígono no pasó de los 15.000 euros”.
El invento ya atravesó fronteras llegando incluso a Suecia, donde una empresa de farolas está interesada en comprar la patente para instalar el sistema antirrobo en la fabricación de las mismas.