El Concello de Nigrán estrenó esta semana un parque biosaludable y un mirador en la calle Costiña como parte de la humanización de la calle Otero Pedrayo. Los trabajos de renovación de la carretera, con 1.364.422 € de inversión a cargo del Concello (30%) y la Diputación (70%), incluyeron habilitar este nuevo espacio municipal de 450 m2 constituido antes por un talud sin posibilidad de uso alguno. El conjunto está formado por 6 elementos de ejercicio, una bancada y un mirador en la parte superior con dos bancos de madera cara Praia América.

«Otero Pedrayo era coñecida por ter as peores beirarrúas da provincia, pasando do abandono absoluto á que estivo sometida durante décadas baixo a titularidade da Xunta (o Concello acadou o traspaso en xullo de 2020, despois contratouse o proxecto, licitouse e emprendéronse as obras) a ser desde este mes un vial de referencia nas humanizacións emprendidas polo goberno local», indica el alcalde, Juan González.

“A transformación da rúa é absoluta, está irrecoñecible tras máis de 30 anos de abandono por parte da Xunta. Agora é unha estrada amable, accesible, con puntos de encontro para a veciñanza e incluso esta zona verde. Sabemos que as obras se demoraron moito máis do previsto, que causaron centos de inconvintes, e pedimos desculpas por iso, pero o resultado é espectacular, da gusto camiñor por ela. Fomos quen de facer en 18 meses o que a Xunta non fixo en máis de 30”, considera el regidor.

La humanización comprendió la completa renovación de los colectores de abastecimiento y saneamiento, creando a mayores una red separativa de pluviales que no existía. Asimismo, se dio al fin continuidad a las aceras que finalizan abruptamente a la altura del Centro Antena (calle Porqueira) mediante la creación de unas nuevas que sí cumplen la normativa de accesibilidad y en hormigón pulido colorado con canto en piedra, siguiendo así la estética de su vecina calle Mariñeiro. Los pasos de cebra son, además, sobreelevados y con iluminación específica mediante una barra lateral con el objetivo de otorgarles la máxima seguridad, tal y como ya hizo el Concello en otros del casco urbano.

Adicionalmente, se renovó el asfaltado en toda la calle, se cambió la iluminación LED con nuevas farolas con un fuste personalizado con el grabado en corte láser del escudo de Nigrán y se eliminó el tendido aéreo eléctrico y de comunicaciones, desapareciendo los postes de la carretera. La plantación de cerezos ornamentales en todo el recorrido de las nuevas aceras otorga a toda la zona una imagen más amable, hecho que se complementa con nuevo mobiliario urbano (bancos y papeleras).