La Praia y la Península de Santa Marta, próximas al estuario de A Foz do Miñor, uno de los espacios naturales más valiosos de Galicia, protegido bajo la Red Natura 2000 como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Conservación (ZEC), «atraviesa una grave crisis ambiental agravada en los últimos años», afirman desde Podemos.
La formación indican que a los vertidos continuados de aguas residuales urbanas e industriales, procedentes principalmente de la deficiente Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Gondomar y los efectos negativos de las competiciones acuáticas a motor, etc.. «se le suma ahora una nueva amenaza añadida, la ampliación del Puerto Deportivo de Baiona».
Comentan que este nuevo proyecto podría «alterar de manera irreversible las corrientes marinas que oxigenan y mantienen el equilibrio salino del estuario, afectando directamente a la dinámica sedimentaria y acelerando el deterioro de la marisma». Matizan también que las alteraciones proyectadas en el litoral, de llevarse a cabo sin una evaluación ambiental rigurosa y actualizada, «supondrían un impacto añadido sobre este frágil ecosistema, incrementando la presión sobre las playas adyacentes y afectando a la posibilidad de disfrutar de las mismas».
La formación denuncia que la situación atenta contra el interés público a muchos niveles, desde el uso y disfrute de las playas, «a las que pone en riesgo de desaparición como ya sucedió con A Ribeiriña», además de la protección y conservación ambiental, anteponiendo intereses privados económicos a los de la ciudadanía. Su portavoz Agustín Silva, advierte que dada la cercanía a la zona de la Red Natura 2000 «la Evaluación de Impacto Ambiental (EAI) sólo podría tener viabilidad en situaciones muy específicas, no obstante, ninguna razón aparente estaría por enzima, ya que un amarre de yates privado no puede considerarse una infraestructura de interés general”.
Con todo, la formación afirma haber requerido dichos informes del proyecto a la Xunta, a Portos de Galicia y al propio Concello, aunque “sin muchas esperanzas por cómo actúa el Partido Popular normalmente”, afirma, por lo que ya están en conversaciones con varios grupos ecologistas para valorar las medidas legales necesarias que se podrían llegar a tomar para paralizar la ampliación.
La agrupación municipal reclama la modernización del sistema de saneamiento, la protección real y efectiva de los hábitats de la Red Natura 2000 y una moratoria sobre cualquier proyecto portuario que pueda agravar aún más la situación sin una evaluación de impacto exhaustiva e independiente. “Solo así será posible restaurar y proteger la calidad ambiental de este enclave único, en defensa de la biodiversidad, el patrimonio natural y la futura salubridad de las aguas”, señalan.