La Dirección Xeral de Saúde Pública de la Consellería de Sanidade sigue investigando el brote de legionella, con 10 casos, que afectó a los ayuntamientos de A Guarda y O Rosal. De estas 10 personas, en la actualidad 7 de ellas permanecen hospitalizadas en el Hospital Álvaro Cunqueiro.

Hay un nuevo caso confirmado, cuyos síntomas aparecieron hace por lo menos una semana, de modo que no se trataría de un caso nuevo.

Siguiendo los protocolos de Saúde Pública, el departamento sanitario gallego constituyó un equipo de investigación epidemiológico y ambiental del brote, tomando muestras del agua de traída de las zonas donde residen las personas afectadas, así como del domicilio de cinco de ellos, resultado las pruebas negativas.

Asimismo, técnicos de la Dirección Xeral de Saúde Pública, encabezados por la directora general de Saúde Pública, Carmen Durán, mantuvieron una reunión de trabajo con representantes de Salud Pública del Gobierno de Portugal, para intercambiar información sobre los casos de legionella gallegos y los detectados en el norte de Portugal, concretamente en la localidad de Caminha.

En este momento, aún no se puede concluir cuál es la fuente de exposición. Hace falta subrayar que el contagio se acostumbra a producir por aerosoles.

La Consellería de Sanidade mantiene informados a los regidores de ambos municipios de la situación y de los resultados de las medidas tomadas.

La investigación ambiental sigue en curso, estando analizándose la curva epidemiológica, que permitirá definir si el brote se puede dar por finalizado.