La Diputación de Pontevedra recibió 16 ofertas de empresas interesadas en realizar las obras de la carretera provincial de Baredo, Baiona, que permitirán una mejora del Camino de Santiago por la Costa.

El diputado de Movilidad Uxío Benítez, responsable del proyecto, manifestó que la actuación supondrá “un antes y un después” para la comunicación del vecindario de la zona y también para los peregrinos que pasan por la vía, ya que se construirá una nueva senda de un kilómetro de longitud y 2,5 metros de ancho totalmente accesible que garantizará la seguranza viaria para los peatones.

Después de tener recibidas las ofertas para la obra, los servicios técnicos de la Diputación tendrán que analizar en los próximos días la documentación presentada por las constructoras y hacer una propuesta de adjudicación. Entre las cuestiones que se van a estudiar está el programa y equipo de trabajo para la obra (18 puntos), el plan de control de calidad (5 puntos), la memoria de trabajo (18 puntos), y el plan de actuación ambientales (8 puntos). Las empresas que consigan un mínimo de valoración pasarán a la siguiente criba, la valoración económica, donde el menor precio ofertado obtendrá un máximo de 51 puntos.

Una vez escogida la adjudicataria, deberá ser aprobada en Junta de Gobierno y a partir de ahí se formalizará el contrato y se presentará el acta de replanteamiento de la obra. El plazo de ejecución está fijado en seis meses luego del inicio de los trabajos que, si no se producen complicaciones, podrían comenzar a finales del verano. La obra se realizará gracias a la inversión del departamento de Movilidad provincial en convenio con el Concello de Baiona, que financiarán al 80%-20% el importe de 381.022,32 euros respectivamente.

Segundo explica el diputado Uxío Benítez, las carreteras provinciales EP-2202 y EP-2203 que coinciden con el Camino de Santiago y donde se hará la actuación de la Diputación tienen en estos momentos características únicamente idóneas para la circulación de vehículos, haciendo que las personas tengan que correr riesgos al transitar por la zona.

Por este motivo se construirá la senda, se limitará la velocidad de los coches a 30 kilómetros hora, y se instalarán reductores físicos de velocidad de vehículos para calmar el tráfico de manera efectiva. Por último, se construirá un mirador en el lugar de Monte Alto, donde se habilitarán unos bancos para poder disfrutar del paisaje en una cuota de 100 metros sobre el mar con vistas a la bahía y a la cara sur de las Islas Cíes.