Hoy se celebró la XXVIII Cumbre entre España y Portugal tras las grandes murallas del parador conde de Gondomar de Baiona, a la que asistió el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y el Primer Ministro Portugués, Pedro Passos Coelho.
La Cumbre arrancó con casi una hora de retraso sobre el horario previsto, que era a las 10:30 horas, con el Consejo Hispano-Luso de Seguridad y Defensa. Acto seguido tuvo lugar la reunión del Presidente de Gobierno y del Primer Ministro portugués, y en paralelo, se iniciaron las reuniones sectoriales a nivel ministerial y de Secretarios de Estado.

Esta cumbre se enmarca en un contexto de entendimiento bilateral en prácticamente todos los grandes asuntos de la Unión Europea y, singularmente, en el de la construcción de la UE de la Energía. El presidente de la Comisión Europea espera reactivar la economía de la unión, se anticipa como una de las decisiones de mayor calado de la reunión, recibida con algo de lluvia en la villa del Val Miñor.
En las conclusiones de la Cumbre se presentó una Declaración conjunta, que recoge una referencia al 30º aniversario de la adhesión de España y Portugal a las Comunidades Europeas, que se celebra este año; así como al papel clave que han tenido las reformas estructurales para el crecimiento económico y la creación de empleo tanto en España como en Portugal.

El alcalde de Baiona, Jesús Vázquez Almuíña, también asistió a la reunión, junto con su equipo de gobierno en representación a la Villa.
