Esta mañana, el Alcalde de Baiona, Jesús Vázquez Alumiña y Enrique Fernándes de Córdoba y Calleja, sobrino-nieto del homenajeado, han inaugurado la glorieta “Luis Calleja”.
La glorieta, que se sitúa en las calles Tomás Mirable y la carretera de subida a la Virgen de la Roca, se convierte en un símbolo de gratitud y respeto al ilustre veraneante, personaje que contribuyó al conocimiento de la Villa de Baiona más allá de sus fronteras y principal promotor de la estatua de La Virgen de la Roca.
En el acto se ha procedido al descubrimiento de una placa con el nombre del homenajeado que ha corrido a cargo del regidor baionés y el familiar de Calleja. Acompañando a la placa de la rotonda el Concello ha colocado unas piedras que corresponden a las piedras originales de La virgen de la Roca que fueron extraídas de la estatua durante su restauración. De este modo, las rocas muestran el camino indicativo al monumento baionés, promovido con fuerte ahínco por Luis Calleja.
Calleja inició la actividad veraniega del pueblo, fue su protector y tuvo una influencia decisiva en que se construyera la Virgen de la Roca. En contacto permanente con sus amistades baionesas, siempre se implicó en las necesidades de la localidad. Fue organizador de varios eventos solidarios para ayudar a los más desfavorecidos del lugar.
En reconocimiento de lo mucho que había hecho por Baiona el Concello de Baiona acordó por mayoría absoluta restituir la memoria del ilustre veraneante.
Ya en 1910, el Concello, siendo alcalde D. Francisco Blanco González, reconoció la eficaz labor que Calleja realizó por Baiona pues acordó por unanimidad bautizar con su nombre el paseo que conducía al monte donde se proyectaba construir el monumento de La Virgen de la Roca. En 1982, se acuerda en el pleno, cambiar el nombre del paseo Luis Calleja por la Avenida Joselín.