Unos trozos de cornisa cayeron al suelo ayer en la calle tomiñesa Mariano Ordóñez.
Los cascotes se precipitaron sobre las 21:00 horas, y cayeron al suelo sin provocar daños personales. Al lugar acudieron GES de A Guarda y Bomberos del Baixo Miño (Porriño) para efectuar las labores de limpieza.
Al parecer todo apunta a que el derrumbe se produjo por las altas temperaturas.