El grupo municipal del PP de Tomiño lamenta la “falta total y absoluta de vivienda en el municipio que se padece en la actualidad» y responsabilizó de esta situación a la “política urbanística restrictiva y asfixiante desarrollada por el gobierno local del BNG en los últimos 18 años, que impedió que la villa y el resto del ayuntamiento crecieran acorde a las necesidades de los vecinos».

“Las políticas urbanísticas y residenciales del BNG, primando exclusivamente un modelo urbano frente a la posibilidad de la gente de establecer su proyecto de vida en Tomiño, nos llevó a esta terrible situación, en la que los tomiñeses que se quieren independizar tienen que irse a otros ayuntamientos y la gente que quiere venir a vivir a nuestro término no puede hacerlo”, indicó la portavoz municipal, Mónica Otero, que añadió que esta acción política “cercena el futuro de Tomiño” y apremió al gobierno nacionalista a que adopte soluciones residenciales.

El PP de Tomiño considera que la política urbanística implantada por los nacionalistas «desmotivó al sector privado para la construcción de viviendas, que en los últimos años «se acometió de manera pequeña y con un ritmo muy inferior a otros ayuntamientos del entorno que ganan constantemente población, como O Porriño, Salvaterra o Salceda, entre otros«, añade.

Además, los populares añadieron que, «a esta situación de dificultades para el sector privado, también se añadió la total ausencia de medidas por parte del gobierno nacionalista de Sandra González para la promoción de vivienda pública, ya que ni desarrolló suelo para estas residencias ni se adhirió a las muchas líneas de ayuda que tiene la Xunta para la promoción de pisos y casas con algún régimen de protección o para impulsar las rehabilitaciones e incrementar el parque residencial».

Los populares indicaron que la cifra de viviendas de Tomiño creció de manera escasa en los últimos quince años, situándose ligeramente por encima de las 5.500. «Pero el problema es que en este tiempo la cifra de viviendas principales se incrementó en aproximadamente un 10% hasta situarse en 5.100, por lo que apenas restan 400 con la catalogación de segunda residencia o vacías. Ahora mismo debemos tener bastante menos de un centenar de casas o pisos sin ocupación, que es una cifra muy baja, pero es que además ni siquiera todas están en el mercado, por lo que la falta de vivienda es grave y acuciante”, explicó la concejala popular.

Por ello, desde el PP tomiñés le piden al gobierno local que “le dé una seria pensada a su política urbanística con el objetivo de que se pueda crear vivienda privada en el municipio y también a que mueva ficha y se ponga a trabajar de una vez por todas” en el impulso de vivienda pública.

No hicieron nada en 18 años desde el Concello y ni siquiera ahora, con la gente marchando a otros municipios, se acuerdan de ello, a pesar de que la Xunta, más allá de construcción directa de pisos públicos en las ciudades por ser las zonas de mayor presión y demanda, tiene en marcha decenas de medidas en esta materia para municipios como el nuestro que se están mostrando efectivas en aquellos más activos y que ya se las demandaron”, concluyó Mónica Otero.