Los alumnos del taller de empleo Manuel B. Portela realizaron una visita a la nave de “redeiras” de la Asociación Atalaia de A Guarda, donde conversaron con tres de sus integrantes. Con el motivo del Día de la Mujer quisieron rendir homenaje a estas mujeres, que con mucho esfuerzo y trabajo llevan a cabo una labor tan importante para el sector pesquero. Las protagonistas son Marina, Sara y Carmen.
Marina y Carmen ostentan cargos de la directiva de la asociación, y relataron muy detalladamente al alumnado como era su trabajo, como fue el desarrollo de la asociación, cuál es el presente, como fue el pasado y como viene el futuro.
La Asociación lleva casi 20 años en activo. Cuando empezaron cada una trabajaba en su casa, ya que no tenían aún la nave con la que cuentan actualmente. Relatan que venían los camiones con las redes y cargaban todo a mano. Poco a poco se fue regularizando la profesión y realizaron cursos de formación donde acudieron muchas mujeres, entre 60 y 70, y así fue cómo surgió dicha Asociación. Cuentan que en A Guarda todos ataban, ya que había muchos barcos con redes de hilo. Los comienzos fueron duros y pelearon mucho para poder tener una nave, hasta que la consiguieron, mejorando mucho sus condiciones de trabajo.
Como mujeres destacan que los pocos hombres que ataban estaban contratados por los barcos y tenían unas condiciones laborales mejores que las de ellas, aunque hoy en día todas tienen su seguro de autónoma y unas condiciones laborales mucho mejores que cuando trabajaban sin seguro.
Marina destaca que en sus comienzos tenía que compaginar el trabajo de redeira con criar a los hijos y las labores de la casa, y no fue fácil. Otra de nuestras protagonistas es Sara, la más joven de todas. Destaca que lo de redeira le viene de familia, es hija y sobrina de redeiras, y desde que comenzó está muy contenta. Lleva su salario para casa y concilia muy bien la vida familiar y laboral. Dice que se formó haciendo cursos en Marín. Carmen lleva trabajando desde niña. Empezó en este oficio en las antiguas chabolas, y tuvo que dejar la escuela de muy pequeña. Cuando tuvo hijos, volvió a retomar su trabajo y hoy en día es la presidenta de la Asociación.
Las redeiras de A Guarda trabajan para muchos armadores de toda Galicia, destacan que hoy en día no les falta trabajo, y animan a la gente joven a que sigan el relieve de esta hermosa profesión. Destacan que tienen unas condiciones muy dignas y que ganan un buen salario. El colectivo de redeiras tienen el sello de Artesanía de Galicia por su labor, pero desde hace un tiempo también elaboran otra artesanía que contribuye al incremento de sus ingresos, en la nave tienen una pequeña exposición donde mostran hermosas piezas de bisutería, colgantes, pulseras, sortijas, colar, pero también bolsas para la compra, fulares, chaveros y muchos más detalles, todo con motivos marineros y hechos con un gusto exquisito.
La Asociación de redeiras Atalaia organizará en breve cursos de formación para quien quiera aprender el oficio y obtener un certificado de profesionalidad que capacita para el ejercicio de la profesión. Animan a la gente joven para que cojan el relieve, ya que según dicen las condiciones de trabajo y salario son muy buenas y ofrecen una flexibilidad que en otros sitios no hay. Resaltan que de ser más asociadas, tendrían mucho más trabajo, que hoy en día no pueden aceptar por no tener tiempo para asumirlo.