El Servicio de Gardacostas de Galicia retiró en los tres primeros meses de campaña de extracción del pulpo más de 12.000 nasas que estaban calladas de manera irregular en las costas gallegas.
Estas cifras son el resultado del refuerzo de los controles del ente dependiente de la Consellería do Mar desde que finalizó la veda de esta especie y que supuso que cerca del 95% de los útiles incautados en esos tres meses fueran nasas, principalmente de pulpo, «un producto que resulta atractivo para los furtivos por su gran calidad y los precios que consigue en el mercado».
Las zonas en las que los guardacostas retiraron más nasas en estos tres meses fueron el sur de la ría de Arousa, con más de 2.900 unidades, seguida de la que va de Fisterra a Porto do Son, con algo más de 2.800, y de la zona de Vigo-A Guarda -que incluye toda la ría de Vigo y la zona costera de A Guarda-Oia, con cerca de 2.000 nasas. El resto de las zonas ya quedan por debajo de las 1.300 unidades retiradas por estar calladas de manera irregular.
El Servicio de Gardacostas de Galicia realizó entre julio y septiembre de este año más de 2.800 inspecciones, tanto por la costa como en el interior de la comunidad, y en ellas contabilizó algo más de 850 infracciones. Fruto de esos operativos decomisó cerca de 10.000 kilos de distintos productos del mar y se incautó de más de 13.000 útiles y aparatos de pesca.
En este sentido, la Consellería do Mar vuelve a hacer un llamamiento a la ciudadanía para que compre sólo productos procedentes de los canales legales, los únicos que cuentan con todas las garantías para su consumo, y recuerda el daño que la actividad irregular hace a los profesionales del sector dada la importancia socioeconómica que las actividades pesquera y marisquera tienen en la comunidad.
Importancia del pulpo
El pulpo es una de las especies más importantes para la flota de bajura, de la que en la última campaña completa se comercializaron cerca de 2.000 toneladas. Esas ventas dejaron unos ingresos próximos a los 17 millones de euros, la cifra más alta de la última década. Mientras, en estos tres primeros meses de la actual campaña se subastaron más de 550 toneladas, con las que los centros de primera venta de la comunidad recaudaron más de cuatro millones de euros.