Las alfombras florares de A Guarda ganaron la batalla a la lluvia, y el municipio celebró por todo lo alto la festividad del Corpus Christi.
La persistente amenaza de lluvia hizo que la confección de las tradicionales alfombras florales se llevara a cabo sobre las seis de la mañana del domingo, más tarde de lo habitual. A pesar de ello, A Guarda presentó unas preciosas y espectaculares alfombras florales.
Por suerte la lluvia esperó justo al final de la procesión para hacer acto de presencia en A Guarda.