Este año la rondalla de Vincios cumple 75 años. A lo largo de estos 15 lustros de historia, sus componentes han tocado infinidad de canciones, han desfilado por cientos de calles y han ensayado miles de horas.
Desde sus comienzos en el año 1942 hasta el día de hoy, la rondalla vio pasar cientos de integrantes que llenaron de música los pueblos en los que acudían a tocar. Dos de esos componentes, Casimiro y Jaime, nos relatan en primera persona los comienzos de una de las rondallas más antiguas de Galicia.
Tanto Casimiro como Jaime están ya jubilados. Uno tiene 83 años y el otro 75. Los dos comenzaron desde muy jóvenes en la agrupación y ambos, han pasado gran parte de su vida como miembros de la rondalla.
“La comparsa fue fundada por un grupo de amigos de Vincios. Rial, Rey, Delfino, Devesa, Aquilino, Os do Lameiro….” explica Casimiro, quien comenzó en la rondalla a los 15 años y hace poco tiempo que lo dejó. “Cuando yo empecé, la agrupación tenía cuatro o cinco años. Por aquel entonces sólo éramos unos 20 en la comparsa y cada uno iba vestido como podía. Al principio tocaba las conchas, luego los platillos pequeños y más tarde, el bombo, hasta que me jubile,” recuerda el octogenario.
En esos años los instrumentos estaban hechos con “buxo”, como las flautas, o de piel de oveja, como los bombos y las panderetas. “El día de Reyes, recorríamos todos los pueblos de Gondomar y Nigrán. Íbamos a pie, porque no había coche” indica Jaime, que comenzó en la rondalla a los 18 años tocando la pandereta.
Tras hacer la mili, Jaime cogió la bandera. “Al principio había cuatro, y años más tarde aumentaron a siete. Había que ensayar tres días a la semana durante horas para compasar las siete banderas, era muy duro y muy difícil” asevera el abanderado.
En Gondomar celebraban un concurso de rondallas que siempre ganaba Valadares. “No sabíamos porque pero siempre ganaban. Un día hablé con el concejal de cultural y le dije que eso tenía que acabar, porque nosotros éramos mejores que ellos, y nos dieron el premio,” explica.
Una de las anécdotas que el ex miembro de la rondalla recuerda, es que la comparsa de Vincios era muy apreciada en O Porriño. “Recuerdo que un año, en un concurso que celebraron, el alcalde de la localidad la dijera al secretario que nos dieran 15.000 pesetas por ganar, cuando el premio eran 13.000”.
Tras unos años de abanderado, declinó el cargo a su hijo. “Luego continúe como Capitán durante unos años y me jubilé siendo organizador de la rondalla,” concluyó Jaime.
Este sábado, a las 16:00 horas en el Adro de Santa Lucía, la rondalla de Vincios celebra su 75 aniversario. Sus 100 componentes serán agasajados con un homenaje por parte de sus rondallas hermanas: