ALFREDO

Este fin de semana se celebra en Gondomar el XV Congreso Internacional de Aviornis que reúne en la villa Condal a un total de 800 personas de 28 países, entre criadores y aficionados. La cita sirve para reivindicar la cetrería como arte milenario y patrimonio inmaterial de la humanidad.

A lo largo de los tres días se suceden los talleres y conferencias sobre el mundo de las aves. Uno de los momentos más esperados de la jornada del sábado fue la exhibición de vuelos de aves rapaces a cargo de los cetreros José Antonio Alonso y Víctor Romero, ambos de la empresa “Las Águilas de Valporquero”.

Así, el campo de As Gaiandas acogió una muestra de aves rapaces, tanto nocturnas como diurnas, “para que se conozcan de cerca estas especies”, y una demostración de vuelo con “un Halcón Sacre del desierto de Arabia, una Catártica de la familia de los Buitres, un Búho Nival, una Lechuza Común y Águilas de Harris”, señaló el cetrero leonés, José Antonio Alonso.

Pero para que nosotros podamos disfrutar de una demostración de vuelo de aves rapaces antes hay un entrenamiento previo que consiste en pasar por las técnicas de la cetrería, “la mayoría de ellas tradicionales, escritas desde la edad media y refrescadas por Félix Rodríguez de la Fuente, que fue el gran maestro de los cetreros actuales”, indicó José Antonio Alonso, con más de 25 años dedicados a la cetrería.

El veterano cetrero asegura que “previo a todo esto, en la actualidad hay una labor muy importante que es el de la cría, el trabajo de producción, el control de los huevos o el de la crianza de los pollos, luego ya vienen los entrenamientos diarios, a que las aves vuelen y ejerciten los músculos y confíen en nosotros”.

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