Se publicó una nueva investigación científica sobre la dieta del rorcual aliblanco (Balaenoptera acutorostrata) en las costas atlánticas ibéricas, a partir del estudio de estómagos recogidos por las redes de varamientos de Galicia y Portugal, y que fue coordinado por Silvia Monteiro, investigadora de la Universidade de Aveiro.
Este es el primer estudio de la dieta del rorcual aliblanco en el sur de su área de distribución en el Atlántico NE, en el que participaron investigadores de la Universidade de Aveiro, de la Sociedade Portuguesa de Vida Selvagem, del Instituto de Conservación da Natureza de Portugal (ICNF), de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (CEMMA), del Centro Oceanográfico de Vigo (IEO, CSIC) y del Instituto de Investigacións Mariñas (IIM, CSIC).
Esta especie de ballena está presente en estas aguas todo el año, con una población estimada de unos 1.400 individuos, y está catalogada por la legislación española y portuguesa como Vulnerable. Por estudios previos realizados en el Atlántico norte se sabe que es un depredador generalista con facilidad para adaptarse a cambios estacionales en la distribución o presencia de distintas presas.
En este estudio en aguas ibéricas se observó que los peces fueron la presa principal, siendo la caballa y la sardina las especies encontradas con mayor frecuencia en Galicia, mientras que la sardina y jurel fueron las más frecuentes en Portugal. La ingesta de crustáceos -como el krill u otros- fue muy reducida en número y prácticamente irrelevante al valorarlo como peso ingerido, apareciendo sólo en 3 de los 26 estómagos estudiados. En general se observó que los machos tienen una dieta más diversa que las hembras.
Se calculó que cada ballena come unos 67 kg de comida diaria de presas de elevada calidad nutricional para poder satisfacer sus necesidades metabólicas. Cualquier alteración en la disponibilidad de esas presas podría comprometer su condición física al tener que consumir otras que aporten menos calidad nutricional.
Se pudo establecer que el porcentaje de sardina en la ingesta se incrementó a partir de 2016 respecto a la década anterior (2005-2015), coincidiendo con la recuperación del stock de sardina en el área de estudio, estimándose que toda la poboación de rorcual aliblanco en esta zona consume anualmente un total de 26.100 toneladas de sardina.
El tamaño de los peces ingeridos coincide con el tamaño de explotación comercial de estas especies, así que podría establecerse una competitividad por el recurso con el sector pesquero, al ter como objetivo las mismas especies y tamaños, con lo que esto podría suponer para la conservación de esta población vulnerable, sumándose a la ya conocida interacción que causa la mortandad de esta especie por captura accidental (causa de muerte en el 34% de los individuos en Galicia y 75% en Portugal).
Por lo tanto, los investigadores resaltan que el seguimiento y control de la población de sardina en la península ibérica será fundamental no sólo para trazar estrategias para su gestión, explotación y conservación, sino también para las especies que se alimentan de ella, como el rorcual aliblanco, procurando la coexistencia sostenible entre la pesca y los depredadores marinos.
La red de varamientos de Galicia cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica, mediante el proyecto Revargal que es financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU a través del Plan de Recuperación, Transformación e Resiliencia (PRTR), y también con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente y Cambio Climático da Xunta de Galicia.