No es nada fácil afrontar la noticia de que tienes cáncer y más difícil es superarlo. El tratamiento es muy duro y las secuelas lo son más. Pero Marina Carrera, una vecina de Tui de 48 años a la que le diagnosticaron cáncer de ovarios, ha superado esta terrible enfermedad gracias, además del tratamiento, “a luchar con todas tus fuerzas y a ser positiva, a tirar siempre para adelante”.
A raíz de su enfermedad, puso en marcha un proyecto para recaudar fondos para personas necesitas con la venta de cuadros que ella misma pinta. Encontró en la pintura un refugio “que me hace olvidar esos momentos malos. Te sientas, pintas, te metes dentro del cuadro, y te olvidas de la enfermedad y, al mismo tiempo, ayudas a otras personas que lo necesitan”, explica Marina con una sonrisa oculta por la mascarilla.
Sus primeros “clientes” son conocidos, familiares y amigos. “Me grabo a mi misma y les mando los vídeos a mis amigos y familiares y les digo que si quieren colaborar en este proyecto. Me encargan cuadros de perros o paisajes, porque yo nunca me senté delante de un lienzo y aún no me atrevo con retratos, pero todo llegará”, señala la novata pintora, quien encontró en este arte “la paz y la tranquilidad que necesitaba”.
Con las primeras donaciones, ha comprado alimentos para familias necesitadas y esta semana ha entregado los primeros 350 kilos de comida a la Asociación SOS Tomiño. Sus trabajos son lienzos con una técnica que ella misma inventó, oleo con silicona de pistola. Ya ha pintado más de 25 cuadros en dos meses y no quiere quedarse ahí, por eso, anima a cualquier persona a participar en su proyecto y colaborar con la causa. “Pueden hacerme encargos a través de mi página de Facebook, de mi canal de YouTube o en mi WhatsApp (662 42 72 68)”, comenta Marina.
La tudense quiere transmitir su mensaje a otras personas que pasaron por su misma situación y las anima “a que luchen, que la vida es muy bonita y hay que disfrutarla, que no se vengan abajo, que, con esfuerzo, casi todo se consigue”.