CEDIDA // Las ovejas junto a los corderos desaparecidos

Gran disgusto el que tiene Javier tras la desaparición el pasado viernes noche de ocho corderos que tenía en una finca cerrada en el lugar de Touza, en Camos, Nigrán. 

Como todos los días, Javier se acercó sobre las ocho de la tarde hasta la finca a hacerles una visita y estaba todo bien. «Estaban todos los animales, 14 ovejas y ocho corderos, pero el sábado por la mañana volví y las crías habían desaparecido», señala muy consternado el propietario de los rumiantes.

Los animales pastan libremente por el enorme campo que está cerrado para que no puedan salir, pero también para que nadie pueda entrar. «La finca está al lado de una carretera, lo que nos hace pensar que alguien se acercó con una furgoneta o un camión para llevarse a los corderos. Lo tuvieron bien fácil, llevaron un capacho con pienso y cuando se pusieron a comer los cogieron, lo curioso es que sólo se llevaron las crías, que tendrían unos tres meses», comenta Javier.

Asegura que nunca les habían visitado los amigos de los ajeno, pero sí recibieron la visita de los lobos y zorros que les mataron varias reses. El disgusto es mayor porque tiene las ovejas como hobby, no como una explotación. «Las vengo visitar y se ponen a corretear por la finca, al final le vas cogiendo cariño. Quiero pensar que quien se las llevó, es gente que las necesita para comer, porque si es para negocio, me cae el alma a los pies», explica Javier, que lleva dos días sin dormir por el disgusto.

Si alguien ha visto algo o puede dar algún tipo de información sobre el paradero de los corderos, puede ponerse en contacto con Javier, quien ofrece una gratificación a la persona que consiga dar con los animales.

Javier: 622 577 181