La Guardia Civil del Puesto Principal de Baiona-Nigrán, procedió esta mañana a la detención de un vecino de Vigo, muy conocido en el sur de la provincia por su reiterada actividad delictiva en el marisqueo furtivo.
Los amplios antecedentes de esta persona, que prácticamente hacía del furtivismo su modo de vida, y los constantes enfrentamientos que venía sosteniendo con los vigilantes de la Cofradía de Baiona, que en más de una ocasión sufrieron agresiones físicas y daños en los vehículos, dio lugar a la apertura de la denominada operación “Rasqueta”.
En el marco de esta operación y dentro de un amplio dispositivo de vigilancia sobre la costa que se estableció esta madrugada, pudo ser detectado cuando estaba extrayendo percebes en la zona del Rompeolas de Baiona y detenido, instantes después cuando salía de la playa con 13 kilos de percebes, una rasqueta y una linterna.
Lo esperaba en tierra un vehículo de apoyo, conducido por un vecino de Baiona, que momentos antes había conseguido salir con una bolsa, con otros 15 kilos, que también fueron requisados.
La operativa policial concluyó con la detención de este mariscador furtivo, al que se le acusa de un presunto delito contra la protección de la flora y fauna por la extracción continuada de percebe en zonas vedadas, sin licencia y sin tallas mínimas, ocasionando un grave perjuicio en las zonas de explotación.
Así mismo, se le atribuyen a esta persona, de 43 años de edad, varios delitos de amenazas a los vigilantes de pesca en el ejercicio de sus funciones y daños materiales de consideración en sus vehículos.
Por su parte, el vecino de Baiona que prestaba su apoyo transportado los percebes en su vehículo, que también fue intervenido, fue notificado de su condición penal de investigado como colaborador en el primero de los delitos.
Con esta operación se ha puesto a disposición de la autoridad judicial un mariscador furtivo que se venía dedicando habitualmente a la captura de percebes en el litoral costero del sur de la provincia, sin licencia, sin respetar las vedas, tamaños ni cantidades, ocasionando serios perjuicios económicos como así determina el informe del Técnico Superior de Acuicultura de la Cofradía de Pescadores de Baiona.
El detenido fue puesto esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Vigo que decretó su libertad, con la obligación de comparecer cada quince días en el Juzgado.
FUENTE: GUARDIA CIVIL