La Guardia Civil de Tráfico de Pontevedra comunica que durante la campaña de vigilancia de desgaste de los neumáticos efectuada desde el día 1 al 3 de diciembre, se han efectuado 1.581 exámenes y comprobaciones a vehículos de todo tipo en toda la provincia, formulando 12 denuncias, sobre todo porque el dibujo no era lo suficientemente profundo en las ranuras principales de la banda de rodadura.
Aunque la vigilancia sobre el buen estado de los neumáticos de los vehículos es permanente, el Subsector de Tráfico, quiere resaltar que durante estas épocas invernales se intensificarán la atención sobre esta circunstancia tan sensible para el comportamiento del vehículo en su circulación.
Quieren recordar también, que los neumáticos son el punto de unión entre el vehículo y la carretera, de ahí radica su importancia y que un neumático en buenas condiciones garantiza un buen agarre y un frenado seguro.
Un neumático en mal estado, desgastado, mal inflado, con cortes y abolladuras, multiplica por 100 el riesgo de accidentes, pero especialmente con lluvia, granizo o heladas, que son factores decisivos en el 60 por ciento de los accidentes.
Su espesor en las ranuras principales debe ser como mínimo de 1,6 milímetros y presenta unos testigos que nos avisan de su desgaste.
También debemos tener en cuenta, que los neumáticos muy viejos, cuarteados, y taqueados, es decir, aquellos que se han desgastado irregularmente, son asimismo muy peligrosos debido a que el agarre de esa cubierta a la carretera se ha reducido considerablemente.
La sanción por circular con los neumáticos por debajo del nivel de 1,6 mm de espesor consiste en una infracción castigada con 200 euros de multa por cada neumático y que incluso se puede llegar a la inmovilización del vehículo, si los agentes de la Guardia Civil de Tráfico consideran que es un riesgo para la circulación.